PAN y PRI van con rumbo acelerado, en Veracruz, para convertirse en partidos de regidores y con unos cuantos alcaldes regados en municipios pequeños que no tienen peso político.
Esto va a concretarse el próximo año y Morena, una vez con el control total de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como de prácticamente todos los alcaldes y la amistad de los órganos electorales, primero, en tres años, volverá a ganar todas las diputaciones y, en seis, tendrá en la mano la siguiente gubernatura.
La gobernadora solo requerirá no cometer los yerros de Cuitláhuac, hacer un mejor gobierno que su antecesor lo que no será nada difícil, atender algunos de los problemas que aquejan a los veracruzanos como la inseguridad y la falta de agua y bajar los niveles de percepción sobre la corrupción… lo demás lo harán los programas sociales, la operación electoral y la propia oposición con sus lastres.
PAN y PRI actualmente solo gobiernan en algunos municipios importantes que el próximo año, si no sucede algo extraordinario, como pudiera ser un milagro, los perderán.
Uno de ellos, en el sur del Estado, sería Cosoleacaque, en donde hasta ahora han gobernado los Vázquez Parissi ligados al Partido Revolucionario Institucional. Sin embargo, cada vez se les ve más cerca de Morena sobre todo tras la derrota de este año, cuando no pudieron hacer gran cosa para ganar, en esa demarcación, las votaciones para la gubernatura y las diputaciones.
Así las cosas se apuesta a que los Vázquez terminarán de arreglarse para conservar parte de su poder, pero ahora por la vía de Morena.
Veracruz y Boca del Río, dos de los cuatro municipios más importantes de Veracruz –los otros dos son Xalapa y Coatzacoalcos- están por decirle adiós Partido Acción Nacional.
Nadie en el PAN tiene la suficiente fuerza como para, con candidatos de su cuadra y sin el respaldo de los Yunes de El Estero, siquiera intentar ganar esos lugares que son el escaparate comercial y turístico del Estado.
De por si Morena ya penetró la muralla que tenían los Yunes, ganando más diputaciones este año en esos distritos y ahora que están del lado guinda, Acción Nacional no tendrá nada que hacer.
Y en Orizaba, en donde por tercera ocasión es alcalde Juan Manuel Diez Francos y siempre ha sido postulado por el PRI, igual que los impulsados por este empresario para sucederlo en el cargo, igualmente Morena ya pudo ganar y, con la visión práctica que tiene el mejor presidente municipal de Veracruz, se prevé que termine de abrirle completamente la puerta a la 4T, ya sea negociando o cediendo.
Xalapa este año fue muy peleada. La alianza PRI-PAN se quedó a unos cuantos votos de ganar dos diputaciones, pero en 2025 lo más probable es que esos partidos vayan por separado y no darán la batalla, además ¿con qué candidatos?
Triste panorama para la oposición, pero sobre todo para todos los veracruzanos que no comulgan con la forma de gobernar de la autollamada Cuarta Transformación, quienes no tendrán buenas opciones a las cuales darles sus votos.
PRI y PAN tuvieron todo ayer, hoy van para convertirse en partidos sin alcaldes y con algunos regidores.
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