Salvador MuñozLos Políticos
La traición, salto, chapulineo o como quiera llamar a la acción de los senadores del extinto PRD, José Sabino Herrera y Araceli Saucedo, de pasarse a la bancada de Morena en la Cámara Alta, simplemente es la cereza al pastel de despedida del Sol Azteca de la vida política del país. Sabino y Araceli dieron un golpe a la oposición digno de “ni Judas se atrevió a tanto” porque ni siquiera han iniciado actividades y dieron el clásico “chaquetazo”.
Ni idea tengo de quién haya sido el operador de la labor de convencimiento para que los perredistas brincaran, pero no debió ser muy complicado: iban a ser representantes de un partido que ya no existe, pero con Morena tendrán la oportunidad de estar “en el lado correcto de la historia”, hasta de crecer políticamente, cosa que ya no harían en donde no hay partido, y eso sí, manteniendo su congruencia en la “izquierda”…
Lo que sí sé es quién fue el vocero del revés al Sol Azteca, a la Oposición y dijeran los románticos, al País: el Güero Velasco, quien de cierto modo, vino anunciando las nuevas adquisiciones del partido en el poder para que en el Senado, igual se tenga “casi” todo el Poder… porque van por uno…
Ese “uno” que le falta a Morena ha de salir del PRI, PAN o MC…
Si se le piensa un poco, en Movimiento Ciudadano andan molestos después de que le tumbaran el escaño a su líder moral por una cuestión de género, entonces no creemos que sea por allí…
En el PRI, ¡ah jijos! Dicen que a veces no es necesario que te pases a Morena… basta con que te ausentes a la hora de la votación o simplemente no acudir a las sesiones relevantes…
Mientras que en el PAN se habla de que Mauricio Vila, el ex gobernador de Yucatán, podría dar el voto que les hace falta.
¿What the fuck! ¿Cómo? Sí, resulta complicado tratar de entender cómo el panista que durante seis años estuvo mejor posicionado entre los Gobernadores del País, de estar entre los precandidatos del PAN a la Presidencia, pudiera aplicar la puñalada trapera.
A diferencia de los perredistas que tienen más que ganar saltando a Morena, pudiera ser que Vila tendría más que perder si no lo hace si hubiera un apretón desde lo que fue su gobierno…
Como sea… el hecho es que a partir del chapulineo de Sabino y Araceli, se le dio la última palada a un partido que tuvo la gran oportunidad de hacer historia y hoy es historia…
Ahora, a esperar qué Senador ha de dar la pauta para que empecemos a cantar a Morena la de Molotov:
Dame, dame, dame, dame todo el power
Para que te demos en la madre
Gimme, gimme, gimme, gimme todo el poder
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