CDMX.- Se confirman los rumores: El mercado laboral mexicano cerró el 2024 con señales alarmantes. Y es que según cifras oficiales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), al 31 de diciembre se contabilizaron 22,238,379 puestos de trabajo registrados, lo que representa una caída mensual de 405,259 empleos. Esta pérdida, equivalente a una contracción del 1.8%, es una de las mayores registradas en años recientes y ha despertado inquietud entre expertos que advierten sobre un posible escenario de recesión económica en el país.
Pérdida mensual que opaca los avances anuales
Aunque a lo largo del año hubo un crecimiento neto de 213,993 empleos (1.0%), el desplome de diciembre anuló el optimismo generado por el crecimiento en sectores clave como transportes y comunicaciones (+3.9%), comercio (+2.8%), y servicios para empresas (+2.1%).
A nivel estatal, solo entidades como el Estado de México, Hidalgo y Guerrero lograron un incremento anual mayor o igual al 4%, en contraste con la tendencia general que apunta a una desaceleración en el ritmo de generación de empleo.
Por otro lado, el registro de patrones también muestra señales preocupantes. A pesar de que al cierre del año se contabilizaron 1,054,947 patrones, esta cifra representa una disminución anual del 1.7%. Esto podría ser indicativo de un entorno económico complicado para los negocios, especialmente para las pequeñas y medianas empresas que suelen ser las principales generadoras de empleo.
El salario promedio sube, pero no basta
El salario base de cotización promedio alcanzó los $587.4 pesos diarios, un incremento nominal del 9.2%, el tercero más alto en 23 años para diciembre. Sin embargo, este aumento salarial no compensa la pérdida masiva de empleos ni el impacto económico que esto conlleva para millones de familias mexicanas.
En otros esquemas de ocupación, como personas trabajadoras del hogar y trabajadores independientes, también se observaron cifras mixtas. Aunque estos sectores registraron avances en afiliación, sus salarios promedio diarios ($362.7 y $305.1, respectivamente) reflejan la vulnerabilidad de quienes laboran en estas modalidades.
¿Recesión a la vista?
Economistas consultados coinciden en que esta significativa caída del empleo podría ser un indicio de un debilitamiento estructural en la economía mexicana, con el riesgo latente de una recesión. Aunque el crecimiento anual del empleo y los aumentos salariales parecen alentadores a simple vista, el deterioro en diciembre no puede ser ignorado.
Ante este panorama, se hace imprescindible que las autoridades económicas tomen medidas contundentes para reactivar la economía y proteger el empleo, evitando que estas cifras negativas se conviertan en una tendencia prolongada en 2025.
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